Nunca es tarde si las vacaciones fueron buenas

Ya se que esta entrada debió escribirse hace unas semanas pero bueno, la frustración y la falta de creatividad, y porque no decirlo, la vagancia, han hecho que se pospusiera hasta ahora.

De lo que en principio iban a ser a lo que finalmente fueron las vacaciones, ha variado un poco. Se han caído integrantes, ha habido baile de fechas, pero lo importante es que se consumó, las vacaciones, mal pensados. Uy perdón, la falta de costumbre ya sabéis: (consumó, para los de la LOGSE, llevar a cabo totalmente una cosa).

Al turrón, el caso es que las vacaciones están divididas en varias etapas. Pero para que lo entendáis bien del todo, diré que para unos empezaron antes que para otros...

Aquí la seguidora número uno del blog, empezó su periplo (viaje muy largo, para los de la LOGSE) en el mes de Agosto, cuando recibió la visita de su amiga de Madrid:

Ah bueno, es cuesta abajo así que llegaría pronto

Playa, piscina, compras, playa, piscina otra vez, más compras, playa y ah si, piscina.

Después se montaron en un bus y tras asarse "literalmente" en Sevilla, llegaron a un pueblo de ésta nuestra querida Extremadura. Si bueno, de la parte más fea y sucia de Extremadura, Badanosequé, pero eso no es importante.

Badajoz arde?? muajajaja

A los pocos días se montó en un coche y ya estaba en la casa de los padres de dos de sus mejores amigos, Campa y el Menda Lirenda.

No vea si eh grande Cáceres, y eso verde que eh??

Allí pasó unos días conociendo a mis adorables padres en primera instancia y después al no menos adorable novio de su Campa.


A los dos días, es cuando las vacaciones toman importancia, pues entro en escena yo.

PAUSA

Espere por favor

OVACIÓN DEL PUBLICO

El público se pone en pie

Pues sí, el 27 de Agosto nos montamos en el coche y cogimos rumbo al Norte, a las frías tierras de Cantabria.

Mira si hay vegetación en el norte, que hasta el mapa es verde

Pero nos estamos precipitando. Antes de llegar a Cantabria, en una de las paradas que tuvimos que hacer para repostar, descansa y/o comer, la seguidora "number one" del blog, quiso retratarse para dejar constancia de su viaje. Y yo como soy un mero escritor. En serio? Vaaale... mero (para los de la LOGSE, simple), no hago más que mostrároslo:

Para mi que no se enteró que la fotografiaba, verdad?

Cualquiera que la vea diría que le gusta posar. No verdad?? :P

Seguimos.

A eso de las 10 de la noche llegábamos al Hotel Fran, que recordaréis, visité dos actualizaciones más abajo. Y como era de esperar, su dueño nos visito con los brazos abiertos y a petición del miembro que no pudo acompañarnos al final, o sea, Campa, inmortalizamos el momento:

For Campa with love

Y ahí es cuando empezaron las verdaderas vacaciones.
Debo decir, que a pesar de que estaba planeado visitar un montón de sitios, yo me esperaba que se visitaran poco menos de la mitad. Ya se sabe que en vacaciones, entra la modorra (esto no lo pienso traducir, lo siento LOGSE) y te apalancas en el sofá y no hay dios que te mueva.
Pero gracias a la buena planificación de nuestro guía, vimos un montón de sitios.
Y sinceramente, mereció mucho, muchísimo la pena:

El segundo día de estar allí, contando como primera, la noche en que llegamos, nos adentramos en lo profundo de Muriedas/Maliaño, porque el principio de uno y el final de otro está un poco disperso...

Visitamos la senda tenebrosa del carril bici y el polígono por donde nuestro meteopingu hace las prácticas con el coche (aclaramos que ya tiene el carné para los despistados):

Y dicen que los bancos de España están muy mal

Donde Jenny descubrió su pasión por los camiones, donde ambos se disputaron el coche que iban a robar mientras yo elegía inteligentemente otro, donde parecía que nos íbamos a perder y sucedería aquello de "nunca más se supo" y mil anécdotas más.

Nuestro viaje prosiguió al día siguiente por las Marismas y el Parque de la Cantábrica, donde unos niños y prácticamente todo Cantabria nos impidió hacernos una foto. Por suerte estos intrépidos viajeros, están curtidos en mil batallas y saben eludir las adversidades.

No iba a salir ella en todas las fotos, no?

Caracoles, arañas, patos, cañones, pescadores... Hubo de todo en este viaje. Incluso un puente a punto de derrumbarse en el que a alguna le costó ponerse. Lo que vemos en la imagen de arriba es un parque con donde terminó el viaje. Pero es que hay mil cosas más, la lucha de dedos, el melancólico, la futbolera, bufff....sería interminable.

Día 4:
Este día fue el que más sitios visitamos. nos levantamos bien temprano y cogimos carretera hasta Potes. A la vuelta iríamos parando en sitios como Fuente De, El Monasterio de Santo Toribio de Liébana, San Vicente de la Barquera o Comillas.
Sería difícil quedarse con una única foto de éste viaje, Potes es precioso, en Fuente De se pueden ver las montañas con su niebla y todo, de San Vicente es Bustamante y camino de Comillas vimos un oleaje en la playa ESPECTACULAR. Pero como hay que elegir una y es muy famoso, al menos en una película que a mi me gusta mucho...con vosotros el Beato de Liébana, digo la beata:

Con ella los milagros ocurren

Próxima parada Santander.

Pero antes de ir a la capital, el día anterior nos dedicamos única y exclusivamente a sentir la velocidad en nuestros cuerpos, el viento sobre nuestros cabellos, el olor a gasolina en nuestras narices....Vamos, que dejamos que Fran cogiera el coche, jeje

Por suerte mi cara de miedo no sale en la foto

Como podéis deducir, si sabéis sumar claro, al estar escribiendo aquí, quiere decir que sobrevivimos a tal evento. Lo único destacable en el mal sentido claro, porque en el bueno podemos decir que aquí el Schumacher en potencia llevó muy bien el coche...es que casi nos dejamos olvidada allí a Jenny la poligonera :P

Ahora si, Santander.
Cierto es que no lo vimos entero. Así nos queda para una futura visita, pero si que vimos una buena parte, incluyendo el Palacio de la Magdalena donde actualmente se rueda la Serie de Gran Hotel.
También vimos un pequeño zoológico allí mismo y ya por la tarde el Museo de la Réplica de las Cuevas de Altamira.

Pero aquí voy a dejar una foto, que aunque no es la mejor, al contrario, tiene fallos, la dejo para dejar (valga la redundancia o repetición) constancia de una cosa: Que yo siempre tengo razón, y si digo que hice una foto al Gran Hotel, la hice, aunque sea asquerosa, jeje.
Si lo sé, soy un sabio y poseo una memoria privilegiada. Como rencoroso decís?? Naaaaahhh

Yo tenía razón

Al día siguiente y ya apurando nuestros últimos momentos, nos fuimos a Vargas a por una almohada y a Puente Viesgo. Paraje muy famoso por que la Selección Española de Fútbol suele hacer allí sus concentraciones antes de partir a ganar títulos europeos o mundiales. Y la verdad, no me extraña por que tiene tranquilidad por los cuatro costados.

Puente Viesgo o tranquilidad a la enésima potencia...

El último día que pasamos en Cantanbria, y antes de sacar los pañuelos y llenarlos de lágrimas, el dueño del hotel paso por la peluquería Jenny, Unisex, por supuesto y le dejó tan mono como vais a ver ahora, en la foto que cerraba el capítulo de Cantabria.

Se nota el paso de los días¿¿?? Ah si, el corte de pelo...

Y como he dicho antes, tras una despedida muy triste dejamos al cántabro preferido de este blog, no sin emplazarnos hasta una nueva visita.

Pusimos rumbo a Málaga de nuevo, pasando y durmiendo una noche en Cáceres y llegamos a la casa de mi seguidora favorita.
Esta última parte del viaje fue más corta de lo esperado, pues a parte que llevábamos ya pocos días se vieron recortados por un triste suceso.
Una persona muy querida para mí, nos dejó en esos días y tuve que subirme para decirle un último adiós.

"Muchas gracias por todo lo que nos diste en vida Pablo"


A pesar de haber sido pocos días, me llevé un gran recuerdo de ellos, con momentos imborrables e inolvidables, como lo fue comer comida basura en la playa o descubrir nuevos parques en Málaga. Y por supuesto con la mejor compañía.

Y hasta aquí llegaron unas vacaciones con algunos momentos malos pero la mayoría de ellos buenos o geniales.
Ojalá todas las vacaciones sean como mínimo iguales que estas, pero sin muertes claro.

Yo desde luego nunca las olvidaré por muy mala que tenga la memoria.

Gracias por haberla hecho posible